El acarreo de combustibles se evita con el funcionamiento de un sistema bombeo solar, que no requiera de facturación para el suministro.
La lejanía o dificultad en el acceso a las energías convencionales en diferentes zonas de cultivo, hace que la energía solar sea una opción práctica para la captación de la electricidad necesaria en el bombeo de agua para riego.
El fundamento del bombeo solar se deriva de succionar un caudal instantáneo relativamente bajo de forma ininterrumpida por la mayor cantidad de horas diarias que la zona permita. Este sistema es contrario al tradicional en el que las bombas son movidas por motores de alta potencia que extraen agua de forma abundante en un corto periodo de tiempo.
El sistema de bombeo solar para riego de cultivos es un método que resulta mayormente eficiente para aquellas zonas áridas donde la temporada de mayor demanda de agua coincide con la de mayor radiación solar.
En dichas zonas, la temporada climática requiere de mayor hidratación para la subsistencia del ganado así como de los campos, pues la alta evaporación en estos días requiere sistemas que efectúen una alta potencia hidráulica, con la generación del trabajo mecánico necesario en el proceso de riego en toda la extensión del terreno. Es por los captadores fotovoltaicos que es posible obtener este proceso sin la necesidad de energías convencionales.
Tanto el mantenimiento de motores como el acarreo de combustibles se evita con el funcionamiento de un sistema bombeo solar, que no requiera de facturación para el suministro.
Aunque el proceso de bombeo de agua con captadores solares tiende a llevar una constante durante los días normales o despejados de operación, la diferencia de radiación que reciben las placas solares en el transcurso de las horas puede provocar que el flujo deje de mantenerse uniforme.
Para continuar con un flujo constante de energía debemos instalar baterías que realicen el suministro. En el caso de no desear la instalación de la batería, se deberá considerar el estanque que obtenga provecho de las mejores horas de sol, acumulando agua para que después el riego sea llevado a cabo a través de la gravitación. Este último sistema de acumulación resulta de gran eficiencia al menor costo.
Existen tres criterios a contemplar en la clasificación para las bombas de extracción:
- El primer criterio considera la manera en que el agua es movida entre los dos niveles. Aquí se encuentras las bombas centrífugas que son mayormente usadas para el riego de cultivos y que cuentan con un mecanismo rotativo que propulsa el agua, y por otra parte las volumétricas, que usan un mecanismo de desplazamiento de agua en forma gradual.
- El segundo criterio, la ubicación de la bomba respecto a la fuente de agua, se clasifican en bombas de superficie o de inmersión.
- Por último está el tercer criterio de selección que se basa en el tipo de motor eléctrico requerido, se tienen las bombas de CC (Corriente Continua) y las de CA (Corriente Alterna).
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