Instalaciones Solares Fotovoltaicas

Para comprender que son las instalaciones solares fotovoltaicas, primero es necesario conocer lo que es una célula fotovoltaica.

Para comprender que es una instalación solar fotovoltaica, primero es necesario conocer lo que es una célula fotovoltaica, también conocida como fotocélula.

La célula, es un dispositivo electrónico con la capacidad de transformar la energía luminosa, es decir, la energía solar, en energía eléctrica. Su composición consta de una lámina delgada hecha de un material semi-conductor; silicio en la mayoría de los casos.

Este material, al encontrarse expuesto a la luz solar, absorbe fotones de luz con la energía necesaria para provocar “salto de electrones”, lo que a su vez conlleva al desplazamiento de su posición original hacia la superficie iluminada.

Una vez que estos electrones con carga negativa se desprenden, originan la aparición de varios huecos con carga positiva. Dado que los electrones suelen concentrarse del lado de la placa donde impacta la luz solar, esto genera un campo eléctrico con dos zonas: la negativa, en la cara iluminada donde se encuentran los electrones, y la positiva en la cara opuesta donde hallan los huecos antes mencionados. SI ambas zonas están conectadas de manera electrónica mediante conductores posicionados en cada cara de la placa, el desbalance eléctrico origina una fuerza electromotriz también llamada diferencia de potencial, lo que genera la aparición de corriente eléctrica para igualar las cargas, y de esta forma se “crea” la corriente continua.

Todas estas células conforman lo que se conoce como un panel fotovoltaico. Esta red de células solares están conectadas en serie para de esta forma incrementar la tensión de salida hasta el valor que se desee, el cual casi mayormente es de 12 o 24 V, y estos a su vez se conectan a varias redes como un circuito paralelo para aumentar la corriente eléctrica que es capaz de proporcionar este dispositivo.

Ahora bien, existen instalaciones solares fotovoltaicas tanto conectadas a red, como aisladas.

Las de red, conforman un sistema generador de corriente continua que es transformada mediante un inversor en corriente alterna. Una vez que ocurre esta transformación, la energía es inyectada a la red eléctrica mediante un contador que registra los kw que son vertidos a la red.

Por otra parte, las instalaciones fotovoltaicas aisladas no se encuentran conectadas a una red eléctrica, sino que se suelen aplicar en la electrificación de viviendas aisladas (para el autoconsumo de electricidad), instalaciones de telecomunicaciones, sistemas de extracción y bombeo de agua y cualquier otro tipo de abastecimiento eléctrico que se encuentre en ubicaciones sin red de distribución o muy alejadas de ella.

Trasladando todo esto a un hogar, las zonas más comunes para encontrar instalado un panel fotovoltaico es en el techo son el techo, en el suelo o en un poste. Sin embargo, en la actualidad, aunque no es lo habitual, pueden hallarse en la fachada, como elemento de protección solar o aplacado en la fachada.